¡Descubre Cuba! Tierra del ron y revolución

Cuba es magia y es pasión. Caminar por las calles de La Habana provoca en el estómago esas mariposas propias de cuando uno está recién enamorado. Cuando uno pasea por La Habana Vieja, por el Vedado o el Malecón no puede hacer otra cosa que disfrutar del entorno y de un pueblo maravilloso. Algunos dirán que es volver al pasado, por sus edificios coloniales y sus coches de época, pero en realidad es trasladarse a un mundo de tesón y carácter. Un carácter que se imprime en cada una de las cosas que podemos ver aquí.

Hay pasión en los puros habanos, en el ron, los mojitos y los daiquiris. Hay talento en la salsa y en el jazz, y hay un pedacito del paraíso en cada uno de los Cayos y, como no, en Varadero. Arena blanca, agua transparente y toda una planta hotelera diseñada para el disfrute de los turistas. En Cuba también cabe la historia, como el monumento al Che en Santa Clara, las ciudades de Camagüey, Pinar del Río o Santiago de Cuba. Todo esto y mucho más en una sola isla: Cuba

La Habana · Ciudad de Ensueño

Pisar la Habana es como hacer un viaje en el tiempo, volver a un pasado colonial pero lleno de vida, color y música. Caminar por la Habana Vieja es volver a los siglos XVII­-XIX. Está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por los más de 900 monumentos históricos que tiene, como el Palacio Presidencial y la Plaza de la Catedral. Pero la Habana ofrece también parte de la historia de Cuba, como bien muestra la imagen del Che Guevara en la plaza de la revolución o el cañonazo a las 9 que se hace cada noche en el Castillo de San Carlos.

Los más animados encontrarán en la Habana el mejor lugar para bailar salsa tanto en la calle como en sus clubes y cabarets. Todo amenizado con un buen mojito o un daiquiri. Y los románticos no olvidarán nunca la puesta de sol desde el malecón, 8 km de paseo desde contemplar las idas y venidas de sus gentes en cocotaxis y en los antiguos coches de los años 50 tan característicos de la ciudad.

Varadero · Paraíso Terrenal

Llegar a Varadero es lo más parecido a llegar al paraíso. Su playa de 20 km de largo es de arena blanca y sus aguas son verdes turquesas. Un lugar perfecto para aquellos que quieran relajarse y tomar el sol mientras disfrutan de su solicitada gastronomía, como la langosta, pero también para los más aventureros que quieran practicar todo tipo de deportes náuticos.

En Varadero podrás vivir experiencias inolvidables como nadar con los delfines en el delfinario, visitar cuevas escondidas como la de los Musulmanes o la de Bellamar, pasear por el tranquilo parque Josone, descubrir una colorida variedad de aves exóticas en la Reserva Ecológica Varahicacos o bucear entre la hermosa barrera de coral. También puedes hacer excursiones más largas y escaparte a la ciudad de Matanzas o a las playas de Cayo Blanco.

Al caer la noche te aconsejamos que disfrutes de su intensa y divertida vida nocturna y dejarte llevar por los ritmos caribeños. Eso sí, no dejes de tomar un guarapo, un cóctel hecho con jugo de caña de azúcar, ron blanco y hielo, ideal para despertar tus sentidos.

Villa Clara · Província con Encanto

Villa Clara es una de las provincias más conocidas de Cuba fuera de La Habana y Varadero. Es famoso porque en su capital, en Santa Clara, descansan los restos del Che, y se ha convertido en un lugar de peregrinación para gente de todo el mundo. Afortunadamente, Villa Clara esconde muchos más tesoros.

La provincia cuenta con plantaciones de tabaco, con lagos donde se pueden pescar percas, una Reserva de la Biosfera ­Buenavista­ y unas playas y cayos que os dejarán sin respiración. Frente a la costa insular se encuentran el Cayo las Brujas y el Cayo Santa María. Estos paisajes aportan un auténtico ambiente caribeño a la zona, perfecta para descansar y tostarse al sol en un paraje único.

Pero las playas no lo son todo. Al margen de la capital, en Villa Clara hay otros lugares que hay que visitar y la ciudad de Remedios es uno de ellos. Es una ciudad con aire colonialque se puede visitar en cualquier momento del año, pero especialmente en diciembre. En el último mes del año se celebran las famosas Parrandas de Remedios. Son unos festivales con fuegos artificiales, baile en la calle y un desfile de carrozas.

Santa Clara · Ciudad Revolucionaria

Santa Clara es una buena opción para aquellos que quieran alejarse de las rutas más turísticas, o las tradicionales postales de sol y playa, y profundizar más en la historia de Cuba. Pisar la ciudad es hacerlo sobre un trozo de la historia de la Revolución Cubana, ya que en esta ciudad se vivió una de las victorias más importantes para la revolución a finales de 1958. Es por ese motivo, que aquí se erigió un memorial que años más tarde se convertiría en el mausoleo del Che Guevara y de sus compañeros.

Es un mausoleo donde a día de hoy residen los restos del Che y en donde todavía podemos leer uno de los lemas más emblemáticos de la revolución: “hasta la victoria siempre”. Aquellos nostálgicos de esta época pueden ver los efectos personales del Che en el museo y visitar el tren blindado que descarrilaron los rebeldes, hoy transformado en un museo lleno de objetos y documentos relacionados con la famosa batalla. Al ser menos turística que otras zonas, Santa Clara es el lugar ideal para conocer el espíritu cubano en su esplendor, paseando por sus calles, decoradas con edificios coloniales y neoclásicos.

Cayo Santa María · Vacaciones Inolvidables

Bienvenidos al paraíso. Hay pocos lugares en el mundo que puedan decirlo y el Cayo Santa María es uno de ellos. Es una pequeña isla de 18 kilómetros cuadrados en los que hay 5 hoteles. Y no hoteles cualquiera. Son de las compañías Barceló, Sol y Meliá de 4 y 5 estrellas y que se han especializado en la opción del todo incluido. Supongo que ya os imagináis las piscinas y el relax propio de unas vacaciones soñadas.

Las playas son de arena blanca y aguas cristalinas. Las cuatro mejores son: Perla Blanca, Las Caletas, Cañón y Cuatro Punta. Una de las diferencias con otros cayos es que hasta aquí se puede llegar en coche gracias a la carretera con 46 puentes sobre el mar. Es el lugar perfecto para practicar deportes náuticos o para quedarse mirando al horizonte y contemplar la naturaleza. Aquí hay una fauna bien diversa. Hay reptiles, anfibios, peces, aves y mamíferos autóctonos y más de 245 especies vegetales.

Cienfuegos · Destino Exótico

A diferencia del resto de la isla, Cienfuegos fue fundada por colonos franceses y esta circunstancia le aporta un toque de distinción muy particular. Desde 2005 es Patrimonio Mundial de la UNESCO en parte gracias a lugares como el Parque José Martí, una de las paradas que tenéis que incluir en vuestra ruta. Dentro de la región, llama mucho la atención Palmira, un núcleo muy reducido pero con una larga tradición en santería católico­yoruba, y en donde podréis asistir a ritos ancestrales. Otro tipo de actividad muy diferente que nos ofrece Cienfuegos es el submarinismo.

La ciudad está ubicada en una bahía muy curiosa y única, que se ha convertido en los últimos años en destino obligado para los amantes de este deporte en la isla. Además, también es muy interesante pasar un día de excursión en El Nicho, dentro del Parque Natural de Topes de Collantes. Está muy protegido y sólo se puede visitar una pequeña parte pero vale la pena. El Nicho es una cascada que cae sobre un lago en el que os podréis dar un baño para refrescaros. Todas estas visitas no estarán completas si no le añadís un poco de ritmo. De Cienfuegos es el histórico Benny Moré, así que para vivir la experiencia en su plenitud os aconsejamos escuchar alguna de sus canciones. Una sugerencia: “Bonito y sabroso”.

Viñales · Refugio de Tranquilidad

Hablamos de una región agrícola, centrada en el cultivo de la caña de azúcar, el tabaco y café, y, a su vez, es uno de los lugares más tranquilos de toda la isla. Aquí la densidad de turistas es baja y la tranquilidad es un valor que se cotiza al alza. De hecho, Viñales cuenta con su ‘Valle del silencio’, cuyo nombre ya nos indica el ritmo y el modus vivendi de los que habitan aquí. Es una zona agrícola donde se cultivan plátanos, tabaco y caña de azúcar y en donde las actividades al aire libre son el plato estrella. En Viñales se puede disfrutar de infinitas rutas cicloturísticas, excursiones por el Valle de Viñales.

Precisamente, en este valle se ha puesto de moda la escalada. Sus más de 400 vías de escalada la sitúan en la cúspide de este deporte en Cuba. Eso sí, os recomendamos que antes de ir a escalar preguntéis a alguna agencia local acerca de las prohibiciones, puesto que se prohibe la escalada a temporadas. Por si ese plan os falla, una visita al Parque Nacional de Viñales es una apuesta segura, al igual que la cueva del Palmarito, donde podremos nadar en una piscina natural de agua bien fría. El último consejo. No podéis volver sin una fotografía del mural de la prehistoria, un graffiti gigantesco pintado en la cara de una montaña.

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